Trabajo cero en Europa: un mundo de sensaciones // Franco 'Bifo' Berardi & Geert Lovink
El sistemático rechazo de los inmigrantes en las fronteras de Europa no es solamente una manifestación de brutalidad, sino el síntoma de una transformación de la Unión Europa, devenida en una fortaleza racista. Crece una ola de nacionalismo y de odio en la población europea. El archipiélago de la infamia se expande en torno al mar Mediterráneo: los europeos construyen campos de concentración en sus territorios y le pagan a sus ‘gauleiters’ (NdR: los jefes de zona del partido nazi) en Turquía, Libia y Egipto para que hagan el trabajo sucio en las orillas del Mediterráneo donde el agua salada ha reemplazado al gas ZyklonB de los hornos. Si no paramos esta barbarie, se estarán asentando las condiciones para una guerra civil racista en todo el área europeo-mediterránea. La rapiña financiera ha empobrecido el continente y los europeos están tan obsesionados y temerosos que toman a esos pocos millones de inmigrantes como chivo expiatorio del desastre económico del ca